Todos queremos vivir una vida larga, feliz, exitosa y saludable. ¿Sabes que con solo unos pequeños cambios en nuestro día a día, podemos desarrollar ciertos hábitos saludables que nos ayudarán a mejorar nuestra calidad de vida? ¡Toma nota y no esperes más!
1. Hidrátate
Somos un 60% agua y, como sabrás, una hidratación adecuada es indispensable a cualquier edad. Para mantener un correcto nivel de agua en nuestro organismo, debemos beber agua -y otros líquidos- sin esperar a tener sed. Y es que, cuando esta aparece, puede que ya exista en nuestro organismo cierto grado de deshidratación.
2. Dieta mediterránea como estilo de vida
Aunque no existe una definición única de la dieta mediterránea, normalmente esta se basa en una alimentación rica en productos de temporada, vegetales, frutas, granos, frutos secos, semillas y aceite de oliva. Convertir esta dieta en un estilo de vida tiene numerosos beneficios para la salud, ya que retrasa el envejecimiento y mejora la salud cardiovascular –entre otros-.
3. Elimina el alcohol y las bebidas azucaradas
Aunque la dieta mediterránea acepta el consumo ocasional de vino tinto, no podemos excedernos con su uso, como tampoco con el de otras bebidas alcohólicas, azucaradas o con alto contenido calórico. ¡Elige el agua!
4. No abuses de las grasas
Las grasas son nutrientes necesarios en la alimentación ya que, además de ser nuestra principal reserva de energía, forman las membranas de las células, ayudan a transportar algunas vitaminas y, a través de algunas de ellas, el organismo forma determinadas hormonas. Por ello, las grasas deben estar presentes en tu dieta, pero con cierta moderación. La Sociedad Española de Nutrición Comunitaria recomienda aportar entre el 30 y el 35% de la energía en forma de grasas. Si estás intentando incorporar nuevos hábitos de vida saludables, ten en cuenta la calidad de las grasas que consumes y elimina o reduce al máximo el consumo de grasas trans (bollería, productos precocinados…).
5. Recetas sencillas para el día a día
¿No sabes cocinar o, simplemente, no dispones de suficiente tiempo? ¡Hazlo fácil! Para tu día a día, opta por recetas sencillas: verduras, pescados o carnes a la plancha, ensaladas, pastas, cremas de verduras y hortalizas… incorpora a tu dieta siempre que sea posible productos frescos y de temporada, y saboréalos en todo su esplendor.
6. Muévete a diario
Las largas jornadas en la oficina y el estilo de vida actual nos mantienen mucho más sedentarios de lo que deberíamos. Elegir desplazamientos a pie en lugar de en coche o en transporte público, o las escaleras en vez del ascensor, son algunas buenas iniciativas para mantenernos en forma. Además, incorporar una rutina de ejercicios de solo 30 minutos al día te ayudará a promover tu bienestar mental, físico y social.
Y tú, ¿cuántos de todos estos hábitos de vida saludables sigues ya en tu día a día? Si te cuesta dar el paso, comienza introduciendo uno de ellos cada mes. Sin darte cuenta, en solo seis meses habrás dado el giro que tu vida necesita.